Hoy, 3 de diciembre, celebramos el Día Internacional de las Personas con Discapacidad con un mensaje claro: el deporte es para todos. Desde la Penya MVP Fanatics Mayvan, nos sentimos orgullosos de unirnos a la Fundación LALIGA en esta iniciativa que busca dar visibilidad a la inclusión y la igualdad de oportunidades.
El fútbol y el deporte en general son mucho más que competición: son espacios donde se construyen valores, se rompen barreras y se crean comunidades. Por eso, esta colaboración apuesta por acciones que promuevan la integración social y laboral de las personas con discapacidad, y por garantizar su acceso al deporte y la cultura como herramientas de transformación.
En la Penya MVP Fanatics Mayvan creemos que la diversidad nos hace más fuertes.
Cada persona aporta algo único, y juntos podemos construir un futuro donde nadie quede atrás.
La inclusión no es un gesto, es una responsabilidad compartida.
En la Penya MVP Fanatics Mayvan, creemos que el verdadero espíritu del deporte no se mide solo en victorias, sino en la capacidad de unir personas y derribar barreras. Hoy, 3 de diciembre, Día Internacional de las Personas con Discapacidad, reafirmamos este compromiso junto a la Fundación LALIGA.

¿Por qué decimos que la inclusión no es un gesto?
Porque no basta con palabras bonitas ni con acciones puntuales. La inclusión es un trabajo constante, una actitud diaria y una responsabilidad que compartimos todos: clubes, peñas, instituciones, aficionados y sociedad en general.
Cada vez que abrimos una puerta, adaptamos un espacio o damos voz a quienes no la tienen, estamos construyendo un futuro más justo.
El deporte es una herramienta poderosa para la transformación social. Cuando una persona con discapacidad puede disfrutar del fútbol, del baloncesto o de cualquier disciplina en igualdad de condiciones, ganamos todos. No se trata solo de accesibilidad física, sino también de oportunidades reales para participar, aprender y sentirse parte de la comunidad.
Desde la Penya MVP Fanatics Mayvan invitamos a todos nuestros seguidores a reflexionar:
¿Qué podemos hacer hoy para que la inclusión sea una realidad y no solo un discurso?
Pequeños gestos suman, pero el cambio verdadero llega cuando asumimos que esta tarea nos pertenece a todos.
¿Nuestro reto? Que este mensaje llegue lejos y que inspire a otros clubes, peñas y aficionados a sumarse. Porque el verdadero espíritu del deporte es unir, no excluir.

